Artículo publicado hoy, 09/02/2010, en el diario La Provincia/DLP


                                         DE TODO UN POCO
Donina Romero
                                    ¿RETIRAR EL CRUCIFIJO?
He leído hace poco que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (Tsjcyl) ha resuelto, a razón de una sentencia, retirar los Crucifijos (así, con mayúscula) en un conocido colegio público de Valladolid, aprobando las peticiones de retirada de los mismos porque hay que respetar las creencias de los padres. Exponiendo además que los progenitores que exigieron tal retirada lo decidieron así porque tal símbolo religioso perturbaba a sus hijos ¿?. Y digo yo que tiene gracia que digan esto los autores de sus días cuando muchos no vigilan las influencias perniciosas como el alcohol, las drogas y la pornografía que les frenan su desarrollo espiritual.
Entiendo que todos los padres deseamos que nuestros vástagos reciban una educación conforme a nuestras convicciones religiosas, pero me pregunto qué daño puede hacerle a un crío o a un adolescente tal Imagen. Y me pregunto también qué sacan con estas tristes manifestaciones que sólo les lleva a crear un ambiente de malestar a su alrededor.
Creo que Dios y el Cielo solamente pueden aceptarse en virtud de una fe y de una creencia en la vida eterna, algo que por otra parte le da sentido a la vida, a nuestra existencia humana, pero sin querer sumergirme en profundidades, no comprendo por qué estorba un Crucifijo en clase cuando es un ejemplo de amor y sacrificio por los demás, algo tan necesario en esta sociedad de la opulencia, de un mundo que sólo vive para satisfacer egocéntricamente sus deseos placenteros, en esta sociedad del consumismo más exagerado y del mayor bienestar cuya religión se resume en “sexo, coche y dinero”, y donde sólo se admira el “parecer” y no el “ser”.
Qué triste es que muchos jóvenes padres de hoy tengan otra conciencia y otros valores porque, equivocados, confunden el darles amor a sus hijos con no hablarles de Dios y colmarles de cosas materiales porque consideran que así sus retoños son más felices, sin darse cuenta de que necesitan el cobijo del cariño pero también la explicación de que hubo un Hombre (aunque lamentablemente no crean en Dios) que murió por amor a la humanidad, y que tal acto fue además de Amor, generosidad.
Uso mi buena voluntad para intentar entenderlo, pero se me cae el corazón a los talones cuando leo o escucho cosas como éstas porque, ¿qué daño puede hacerle a su espíritu saber rezar el “Padre nuestro”, hacer la Primera Comunión, concienciarlos de lo que es pecado y cuántos son los Mandamientos?  Lo que no es de recibo es que estos padres (afortunadamente los menos) exijan al colegio la retirada del Crucifijo, cuando hay otros padres que se imbrican en la religión y en la moral para sus hijos, porque lo consideran de gran ayuda para el crecimiento de sus ánimas y entienden que el ser humano no puede vivir sin la esperanza porque sería hacerlo en la oscuridad, y no hay más bella luz que tener conocimiento de la existencia de Dios.
A mí particularmente, esas convicciones tan radicales me parecen sectarias y fanáticas, y la arrogancia de esas pretensiones las creo inaceptables porque aunque deseen defender su terreno como agnósticos o ateos, no tienen por qué exigir que se dé tal desaire a otros padres creyentes que reciben tal pretensión como una ofensa a su fe.  Ya es triste que a estos jóvenes procreadores no les surja la fe en su interior, y no puedan así nutrirse para todas las actitudes de sus vidas, pero me parece más triste aún que rechacen el Crucifijo para sus hijos porque Él es el mejor camino para ellos y su desarrollo espiritual, y la única verdad con la que contamos, pues creo que así como no se puede vivir sin afectos, tampoco se puede vivir sin Dios. Y me pregunto una vez más, ¿por qué el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León dio luz verde a estas pretensiones y no respetó la de los padres creyentes, para quienes tal retirada ha sido una bofetada a sus creencias? Aquí dejo esta reflexión.

Página consultada 739 veces